Deslizamientos, rotación y flexión , son los movimientos que hacen una y otra vez nuestras articulaciones, con el tiempo la repetición continua provoca el desgaste del «cojín» que hay entre esos huesos y el cartílago.
El desgaste en sí no es una enfermedad, la artrosis no es más que un envejecimiento de la articulación (se puede considerar patológico cuando de da en personas jóvenes o tras un trauma). El desgaste no tiene por qué doler, cuando esto ocurre es que ya se ha llegado a un grado patológico .
Hay muchos factores que pueden dar lugar al dolor por artrosis: desequilibrio mecánico (por asimetría, la presión mantenida, la falta de ejercicio, la obesidad…
Algunos alimentos que pueden mejorar este dolor serían: granada (por sus antioxidantes), frutos secos (por su magnesio), manzanas rojas (por su quercetina), aceite de oliva (porque lubrica), ajo y cebolla (por su azufre), salmón (por su omega 3), pimiento rojo (vitamina C), espárragos (vitamina K).
El ejercicio es una estrategia fundamental para luchar contra la artrosis, hacer unos 30 minutos de ejercicio al día durante 3-5 días a la semana, caminar a buen ritmo es muy beneficioso, los ejercicios de fuerza como levantar pesas también son muy adecuados (para personas mayores mejor aún en el agua).